Arranqué Lean Mind a principios de 2018. Una marca totalmente nueva y la tercera empresa que inicio en mi vida. La primera fué Shidix en 2004 y la segunda Codesai en 2015. Son empresas de las que me enorgullece haber formado parte y que siguen estando activas y prósperas hoy en día. Algo de lo que ayudé a construir sigue quedando allí y me alegra ver que siguen cumpliendo años.
Cuando uno termina una relación laboral típicamente es porque hay una diferencia importante con sus empleadores o sus socios, es decir, porque valoramos cosas distintas o le damos un peso diferente a valores elementales. Además, la situación de cada persona del grupo, su momento vital, influye muchísimo en la vida de las relaciones. Cuando decidí marcharme de Codesai, mi visión empresarial de futuro no coincidía con la de mis compañeros, hasta el punto de que ellos se han convertido en una cooperativa y yo he fundado una sociedad limitada donde soy el único socio mayoritario.
Había tres motivaciones principales para mí al crear Lean Mind.
- La primera y más importante: generar empleo de calidad en el lugar donde vivo, Canarias.
- Contribuir al desarrollo del sector TIC en nuestro país construyendo productos de calidad y de impacto, con humanidad y profesionalidad.
- Dirigir una empresa en solitario, sin consensuar decisiones con otros socios. Esto es nuevo para mí, quería vivirlo y aprender de la experiencia.
Casi dos años y medio después de iniciar Lean Mind, somos un equipo de 22 personas ilusionadas con nuestro propósito, que nos sentimos afortunadas de trabajar con el grupo humano y profesional que formamos. El objetivo de la empresa nunca ha sido crecer por crecer, no es que nos hayamos propuesto multiplicar la facturación cada año ni nada por el estilo. El dinero nunca ha sido el objetivo. Simplemente crecemos cuando aparece la oportunidad, el proyecto adecuado y los candidatos adecuados, porque queremos compartir con la sociedad lo bueno que nos está ocurriendo. En una época tan incierta como esta que estamos atravesando de la pandemia del COVID-19, mantener el empleo y crear más puestos de trabajo en Canarias, es para mí una de las mejores contribuciones que humildemente podemos hacer. Digo “podemos” en plural porque una gran parte del éxito depende de todos los que formamos Lean Mind. Las primeras personas que entraron al equipo fueron las que trajeron a las siguientes y así es como sin darnos cuenta nos estamos convirtiendo en un grupo conocido en nuestra comunidad por su cultura, su calidad, su profesionalidad y su buen ambiente.
Me he dado cuenta de que para trabajar en equipo y construir algo bueno y beneficioso para todos, no es necesario que todos seamos socios de la empresa. Todos los roles son importantes y necesarios y me siento cómodo como director. No es un trabajo solitario como hace años pensaba que podría ser.
Al comienzo de los tiempos pensaba que debíamos enfocarnos en hacer desarrollos a medida para clientes finales. Tenía claro que nuestros clientes estaban fuera de Canarias porque el mercado TIC local da cobertura a las administraciones públicas locales, cosa que experimenté con mi primera empresa y no tenía en mente repetir. Hicimos varios desarrollos para clientes de varios países pero, con el paso de los meses, nos dimos cuenta de que nuestro fuerte es respaldar a equipos de desarrollo que generalmente tienen un producto propio. Nuestro apoyo consiste en sumarnos a su equipo casi como si hubieran contratado personal interno. Nosotros abrazamos su cultura y ellos la nuestra, enriqueciéndonos con la fusión cultural. No llegamos como elefante en cacharrería sino queriendo entender las circunstancias y los hábitos de los equipos en los que trabajamos, para después ser capaces de potenciar sus virtudes o ayudar a cambiar los aspectos que el equipo quiere. Lo que hacemos es programar juntos, ni más ni menos. Nos suelen llamar porque tienen mucho trabajo y quieren desarrollar utilizando las técnicas que manejamos, TDD, Pair programming, … queriendo adoptar nuestros estándares de calidad en sus procesos. Trabajamos en remoto desde Canarias para el mundo. Hemos trabajado para clientes de USA, UK, UAE, Alemania y por supuesto España.
El futuro es muy prometedor porque somos un gran equipo humano y porque el mercado TIC está en plena expansión y lo vamos a hacer bien. Estamos donde tenemos que estar, cuando tenemos que estar. Tenemos mucho talento en las islas y sobre todo buena gente, con buenas y grandes aspiraciones. Somos una empresa que crece a través del crecimiento de sus integrantes, una empresa que crece con las personas. La marca Lean Mind aún es desconocida fuera de Canarias pero no pasarán más de cinco años hasta que se nos reconozca como marca de confianza en Europa. Haber llegado hasta aquí es para mí ya un gran éxito pero esto solo es el principio.
No creo en historias que dicen que una persona de éxito “se hizo a sí misma” y triunfó por sus propios medios. Nosotros estamos aquí por muchos factores, por la contribución de muchas personas, no solo por trabajar duro. En mis valores está ser agradecido y hay una larga lista de personas y entidades a las que les tenemos que agradecer estar hoy aquí y haber llegado a donde estamos. Empezando por la familia. Sin el apoyo de Domingo Alonso Group, en concreto de AIDA, creo que nunca se hubiera consolidado Codesai y sin Codesai no hubiera surgido Lean Mind. Le debemos mucho en particular a Antonio Torres, Emilio Macías, Borja Navarro, Manolo Suárez y Jesús Quintana porque apostaron por mí cuando estaba solo como freelance y confiaron plenamente en mí. Agradezco el apoyo de la ULPGC, en concreto de José Juán Hernández y sus compañeros, porque fue decisivo para ganarnos la confianza de varios colaboradores importantes y para darnos a conocer a los estudiantes, que después serían nuestros aprendices y luego compañeros.
El papel de Kairós también fue muy importante porque nos permitió hacer una contratación clave desde Codesai, gracias a la inversión tan oportuna que hicieron en nuestra empresa. Mi conexión con Kairós se fortaleció con Lean Mind, de hecho, fue la primera empresa para la que trabajamos con la nueva marca, en un proyecto muy bonito de formación a desarrolladoras junior. ¡Muchas gracias por apostar por nosotros fielmente, Kairós! Esperamos seguir colaborando mucho tiempo.
Hoy en día, tanto la ULPGC como la ULL y múltiples centros de formación profesional de Tenerife y Gran Canaria, nos apoyan enviándonos a sus alumnos más motivados para las prácticas en empresa y varios egresados son ya parte del equipo de Lean Mind.
Quiero agradecer a todos mis ex-compañeros en las anteriores empresas todo lo que me enseñaron y me permitieron aprender de mí mismo. A todos los clientes que apostaron por mí durante todos mis años de freelance, que fueron al menos 6. A las comunidades de práctica, la comunidad Agile, la comunidad Craftsmanship y por supuesto las comundidades locales CanariasJS y Python Canarias, por crear una red de conexiones que nos nutre y por darnos a conocer.
Muy importante también para Lean Mind el apoyo de InTech Tenerife y de SPEGC por darnos a conocer, alojarnos en sus instalaciones y estar ahí siempre que les necesitamos.
Gracias a nuestra psicóloga y coach Rosa Elvira González por todo su acompañamiento en nuestro viaje y a nuestra especialista en branding María Inés Arroyo por ayudarnos a expresar lo que somos y a clarificar cuestiones tan importantes como quién es nuestro cliente ideal.
Evidentemente no estaríamos aquí sin nuestros clientes, nuestros queridos y valientes colaboradores, que han apostado por una marca joven como es Lean Mind, sobre todo los primeros meses cuando partíamos de cero. Mil gracias a todos por la confianza depositada en nosotros. Nuestro progreso se debe 100% a ella y es un placer y un honor trabajar con todos vosotros. Mención especial a los amigos de Lean Mind que se acuerdan de nosotros recurrentemente para proyectos diversos, allá donde van. Por motivos de privacidad no pondré todos los nombres de nuestros colaboradores, ni entidades ni personas.
Lo malo de los agradecimientos es que siempre se quedan personas y entidades fuera, pero los que nos han apoyado saben que les tenemos en el corazón, saben que sin ellos no estaríamos aquí, creando empleo en Canarias.